La esclavitud fue una práctica habitual en los diferentes reinos de la Península Ibérica durante la Edad Media. Desde mediados del del siglo XV comenzaron a llegar a los puertos de Andalucía barcos cargados de esclavos procedentes tanto de las Islas Canarias como del África negra. Los de las Islas Canarias eran aborígenes, que iban siendo capturados y convertidos en esclavos a medida que estas islas iban siendo conquistadas por Castilla. Los del África negra habían sido capturados por o comprados a los portugueses en Guinea. La mayor demanda de esclavos era para el trabajo doméstico, por lo que dos de cada tres, eran mujeres.
La esclavitud era un fenómeno frecuente en la España de la época, si bien limitado en su extensión geográfica, pues sólo llegó a tener gran densidad en Andalucía, la Corte y en Valencia y Barcelona (está última ciudad se convirtió con el tiempo en un importante puerto esclavista, como previamente lo habían sido Sevilla y Cádiz), según opinión de los historiadores Antonio Domínguez Ortíz y Bernard Vincent.
Junto a Lisboa, Sevilla conformaba probablemente el punto neurálgico de la trata de negros en Occidente.
En Sevilla y Córdoba todos los grupos sociales poseían esclavos, lo que resulta bastante sorprendente, pues normalmente solemos creer que este era un privilegio del que sólo podían disponer la nobleza y el clero, los dos estamentos sociales privilegiados. Pero, la realidad es que también tuvieron esclavos a su disposición todos los grupos artesanos y de las profesiones del sector servicios. Es decir tejedores,carpinteros, plateros, carniceros, fundidores y albañiles. Todos estos colectivos profesionales compraban, vendían y cambiaban esclavos en los mercados andaluces.
Algunas familias relativamente modestas también poseían alguno. El motivo de tener un esclavo para este tipo de familias menos acaudaladas era por un lado, valerse del trabajo de este y, por otro, pagar una deuda o embargarle o hipotecarlo, cuando se veían en serias dificultades económicas.
La amplitud de la posesión de esclavos a nivel social era tal, que hasta los hospitales dispusieron de esclavos, generalmente con con la finalidad de poder sacar un beneficio económico con su venta.
Caso aparte parece ser el de la situación jurídica del esclavo en Málaga, donde por lo visto, se le reconocían una serie de derechos como la integridad corporal, poder contraer matrimonio o cierta capacidad jurídica.
La población esclava negra tuvo gran protagonismo en las hermandades y cofradías sevillanas. En Sevilla hay una hermandad llamada de Los Negritos,-la más antigua de Sevilla-, precisamente por estar compuesta por esclavos negros. Había hermandades de esclavos en todos los sitios donde había población negra, como Cádiz o Jerez.
En Sevilla, en los siglos XVI y XVII, podía haber entre un 10% y un 15% de población negra y mestiza.
Rutas del tráfico de esclavos hacia América y Europa.
Comerciantes de esclavos marcándoles al hierro.
Pintura que representa al puerto fluvial de Sevilla en el siglo XVI.
Fuentes:
España, con Portugal, es la que inicia la trata de esclavos. http://www.diagonalperiodico.net
Los propietarios de esclavos en Sevilla (siglo XVII) personales.us.es//alporu/histsevilla/esclavos-propietarios.htm Página personal de Alfonso Pozo Ruíz.
Esclavitud en España es.wikipedia.org
mrdomingo.com/2013/04/10/la-desconocida-historia-de-la-esclavitud-en-españa/
sevilla.abc.es/andalucia/malaga/20150806/sevi-desconocida-esclavitud-andalucia-20150851836.html
elcorreoweb.es/historico/el-ultimo-esclavo-de-sevilla-GEEC311412
https://es.wikipedia.org/wiki/Hermandad_de_los_Negritos_(Sevilla)